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La mesa redonda virtual “Empresas que apuestan por la Rꓱ-Evolución: alimentos más saludables”, organizada por Ainia ha sido moderada por su directora general, Cristina del Campo, con la participación del director de ecosistemas y emprendimiento de Capsa Food, Rubén Hidalgo; la directora general de calidad, I+D+i y medio ambiente de Importaco, Teresa Cercós; y el director corporativo de I+D del Grupo Nueva Pescanova, Juanjo de la Cerda.
El impulso del crecimiento del mercado de la comida saludable, parte de una mayoría de consumidores concienciados con la relación entre la calidad de los productos que comemos y nuestra salud. Alimentación personalizada, influencia del Covid en el consumidor, estrategia NAOS, robotización, ingredientes y envases más sostenibles … Son algunos de los temas que se han tratado hoy en la mesa redonda virtual “Empresas que apuestan por la Rꓱ-Evolución: alimentos más saludables”, organizada por Ainia.
Los participantes en la mesa redonda, asociados de Ainia Network, han coincidido en que la alimentación saludable es una de las tendencias que más ha crecido en los últimos meses, especialmente, desde el inicio de la crisis sanitaria. El consumidor busca productos saludables, que refuercen el sistema inmunitario y a un precio más asequible.
En este sentido, la directora general de AINIA, Cristina del Campo, ha destacado que “los alimentos son la palanca más potente para optimizar la salud humana y la sostenibilidad medioambiental. Necesitamos una transformación del sistema alimentario para lograr una dieta planetaria beneficiosa para todos”
En consonancia con el binomio alimentación y salud existen otras demandas en auge en el mercado como: la reducción calórica de los alimentos, la disminución de grasa y azúcares y aquellas marcadas por factores como el aumento de la esperanza de vida; que han impulsado el desarrollo de productos dirigidos a colectivos con necesidades nutricionales especiales como los alimentos para seniors con texturas y cualidades organolépticas adaptadas a estos grupos de población.
También se han referido a la creciente oferta de alimentos y bebidas SIN que responde, entre otros, a cubrir las necesidades de más del 30% de la población con intolerancia a la lactosa. O a la previsión de que, en 30 años, el 50% de la población española habrá desarrollado alguna alergia o intolerancia alimentaria.
Todas estas tendencias, a las que se suman las preferencias hacia lo vegano y lo natural “producen una segmentación de la población cada vez mayor en lo que a alimentación funcional se refiere, que supone que la industria alimentaria sea cada vez más consciente, de la necesidad de potenciar las propiedades nutricionales”, ha añadido Cristina del Campo.
En este contexto, se ha abordado el desarrollo de productos vinculados con la estrategia NAOS (Nutrición, Actividad Física y Prevención de la Obesidad). Sobre este tema, Rubén Hidalgo ha explicado que en Capsa Food han realizado un importante esfuerzo “para decidir qué tipo de producto queríamos construir para la sociedad, cuál era nuestro producto esencia. Reescribimos la manera de entender la innovación y reenfocar nuestra estrategia para priorizar ingredientes naturales, ecológicos, sostenibles y 100×100 libres de azúcares”
Por su parte, la directora general de Calidad, I+D+i y medio ambiente de Importaco, ha explicado que “hace años pensábamos más en el producto elaborado (frito, tostado) pero observamos una tendencia que ahora es clara en el mercado, que el consumidor prefería el producto más natural, menos elaborado, pero muy cuidado desde el origen”
Por otro lado, cuentan con una línea de productos snacks saludables en la que están trabajando para reducir las cantidades de sal y azúcares. En opinión de Cercós, “los tecnólogos debemos buscar el equilibrio entre un producto saludable, que mantenga el componente de placer y de emoción que sentimos a la hora de probar un alimento. Es fundamental lograr productos que sigan siendo atractivos desde el punto de vista de la percepción sensorial del consumidor”
Asimismo, Juan José de la Cerda ha resaltado las propiedades de la proteína marina como un producto natural y saludable, y el trabajo de su compañía para mejorar el perfil nutricional de sus productos más elaborados.
“La personalización de la nutrición va a ir a más en la sociedad moderna, el reto es cómo llegar a la personalización sin perder la esencia de la industria y es ahí donde la ciencia nos facilita poder personalizar nuestros productos”, ha destacado Teresa Cercós (Importaco).
Según Juan José de la Cerda: “Necesitamos desarrollos mucho más potentes para lograr esa personalización de las tecnologías relacionadas con la digitalización y la inteligencia artificial, los sistemas 3D, la personalización aditiva…, van a ser tecnologías de mucha utilidad en este campo”. Actualmente en Nueva Pescanova están trabajando en el desarrollo de productos dirigidos a la introducción de sus productos para mejorar la calidad y variedad de la dieta de los más pequeños.
En Capsa Food, según ha explicado Rubén Hidalgo, “estamos investigando con la comunidad científica en la búsqueda de evidencias que podamos trasladar a diferentes matrices alimentarias”. Están trabajando en un ambicioso proyecto que tiene como objetivo caracterizar la microbiota intestinal a partir de más de 500 muestras, con las que obtener toda la información sobre cómo se configura nuestra microbiota y cómo la nutrición interfiere a largo plazo en nuestra salud.
Para Juan José de la Cerda, esta crisis ha supuesto “un acelerón en la digitalización doméstica y empresarial que es bueno que permanezca en algunos aspectos, como el incremento de las ventas online, la proliferación de foros de formación online…. No obstante, debemos ser capaces de trasladar informaciones objetivas y contrastadas con rigor, evitando la desinformación de las redes para no perjudicar a las marcas”
Para Teresa Cercós: “tenemos que abrirnos más e incrementar la cooperación conjunta entre comunidades empresariales y científicas, centros tecnológicos y universidades para buscar soluciones más globales; uniendo fuerzas obtenemos resultados multiplicados y beneficiosos para todos”
Cercós ha añadido que “el bigdata nos otorga mucho conocimiento sobre lo que puede pasar en el futuro. Nos permitirá: predecir, prevenir, corregir y explorar y, por tanto, ser capaces de superar las expectativas del consumidor”
Rubén Hidalgo (Capsa Food) ha aconsejado “no caer en el tecnofetichismo, debemos entender los problemas del consumidor, los nuestros y averiguar cómo resolverlos. Innovación tecnológica pero con el sentido de aportar valor al consumidor. La transición de procesos industriales a procesos digitales es muy compleja y debe ser más ágil, sencilla, más confiable. Una vez que consigues esto, debes conocer como le das valor al proceso”
Sobre la compatibilización del diseño de productos más saludables con una menor huella hídrica o el desarrollo de envases con menor impacto ambiental. Teresa Cercós, ha explicado su apuesta por el ecodiseño en envases y productos. Otra de sus líneas de trabajo, “es la relacionada con valorizar todo lo que se produce alrededor de sus productos para hacer procesos más sostenibles, otro de los grandes retos que tenemos las industrias alimentarias”
Rubén Hidalgo ha destacado que “el vector principal de nuestra actividad es qué acciones vamos a implementar para afianzar el futuro del medio rural. Nos posicionamos en los criterios de la salud y la sostenibilidad y cómo nos comprometemos de una manera social a construir alimentos (saludables, residuo cero….)”
En esta línea, Juan José de la Cerda, ha coincidido en que “alimentación y sostenibilidad son inseparables y tanto lograr el aprovechamiento integral de todas nuestras materias primas, como colaborar en evitar el desperdicio alimentario con ajuste de raciones, mejora de la conservación…., son nuestras prioridades”.
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