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Para Tomás Pascual, presidente de Calidad Pascual, ya no basta con ocuparse de la cuenta de resultados. Consumidores, clientes, proveedores, ciudadanos y accionistas te van a exigir diálogo, respeto y responsabilidad empresarial.
Calidad Pascual ha presentado su Informe de Creación de Valor Compartido 2015 con un objetivo en mente: armonizar su estrategia de negocio con las expectativas de sus grupos de interés: consumidores, clientes, proveedores, ciudadanos y accionistas. Para ello, busca la consolidación en sus marcas estratégicas, así como convertirse en referente nacional en alimentación saludable, innovación disruptiva, transformación digital y gestión industrial.
La facturación de Calidad Pascual en 2015 ascendió a 690 millones de euros, con un EBITDA de 74,7 millones; lo que ha supuesto una mejora de la rentabilidad del 1,5%. La compañía ha sido capaz de continuar con su proceso de estabilización de la deuda, pasando de 248,9 a 218,1 millones de euros.
En busca del liderazgo
De cara a los próximos años se plantea retos medioambientales y esfuerzos renovados en las causas sociales, así como la apuesta por la transformación digital con el impulso de nuevas startup.
En definitiva, como ha concluido Tomás Pascual, “el refuerzo ético es el ingrediente que debe impulsarnos en la búsqueda del liderazgo. Si gestionamos éticamente, con excelencia y compartimos nuestra cadena de valor, haremos entre todos una empresa más sostenible y reforzada, que además podrá consolidarse entre los grandes líderes de la industria”.