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Las ferias comerciales han sido históricamente puntos de encuentro cruciales para las empresas como plataforma para presentar productos y servicios, pero también como espacio vital para establecer conexiones, crear y acelerar oportunidades de negocio, comprender las tendencias del mercado y fomentar la colaboración. En los últimos años, este sector ha experimentado una transformación significativa, impulsada por la innovación y la tecnología.
Show2Be es un nuevo operador especializado en ferias profesionales de diversos sectores como la alimentación y bebidas. Con su CEO, Raúl Calleja, hablamos sobre el renacimiento de las ferias en la era de los negocios, tecnologías y redes de contacto.
La evolución natural del instrumento de las ferias profesionales gracias a las nuevas tecnologías las posiciona como la más eficaz herramienta de marketing, comunicación y ventas que existe. No en vano, el 40% de la inversión de las empresas B2B en Estados Unidos se focaliza en las ferias profesionales. Está comprobado que el retorno de la inversión cuando se sabe exprimir al máximo es altísimo. No existe otro instrumento que permita captar tantos leads hipercualificados en tan corto espacio de tiempo.
Hay que ser conscientes de que en la actualidad cuando un expositor acude a una feria profesional no ‘compra’ metros cuadrados, sino tiempo y agenda de audiencias, cuota de atención, impactos publicitarios a medida, oportunidades de relaciones provechosas… Factores que hay que tener en cuenta a la hora de analizar los resultados de la participación en estos eventos profesionales y de realizar mediciones y KPIs.
Testimonio de esta evolución es el marketing ferial moderno 3.0. Aunque el objetivo final sea, como lo ha sido siempre, el abrazo o el apretón de manos, el concepto ferial está en constante evolución y se ha movido más allá de los pabellones y stands tradicionales para incorporar experiencias relacionales digitales, nuevas tecnologías, plataformas interactivas, gamificación, comunicación e impactos publicitarios con un valor económico. Una transformación que permite a las empresas llegar a audiencias globales, multiplicando así su alcance y visibilidad, y, por supuesto, sus oportunidades de negocio.
En este contexto, ahora que se inicia la temporada de ferias, podemos decir que en 2024 se van a intensificar tendencias que ya aparecieron en años anteriores, como tecnologías emergentes como la IA, el uso estratégico de los datos y métricas, la sostenibilidad, la personalización y la ‘festivalización’.
La IA y las tecnologías emergentes están revolucionando la manera en que las ferias interactúan con sus audiencias, asistentes y ecosistemas sectoriales profesionales para mejorar la experiencia del usuario. Mientras que el uso estratégico de datos, que proporcionan la analítica avanzada y las métricas, permite a las empresas medir el éxito de su participación en ferias y adaptar sus estrategias en consecuencia, ya que les hace comprender el comportamiento y las preferencias del público.
Por lo que se refiere a la sostenibilidad, las prácticas respetuosas con el medio ambiente y la promoción de la responsabilidad social, más que una tendencia, son una necesidad dadas las exigencias de las Administraciones públicas y de la propia sociedad. En cuanto a la personalización, es imprescindible utilizar instrumentos que permitan que cada usuario personalice su experiencia de consumo ferial dentro de un mismo ecosistema para mejorar la participación y la satisfacción.
Y no podemos olvidar el contexto en el que se celebra la feria. En un mundo en el que la experiencia de usuario se ha elevado a la máxima categoría en todos los ámbitos, en el sector ferial también el ocio y el negocio van más de la mano. Es una forma más informal de hacer negocios para lograr los mismos objetivos.
En un marco como este, el papel de un nuevo operador ferial profesional es multifacético y crucial para el éxito de cualquier feria comercial o exposición. Debe ser eminentemente una empresa orientada 100% a las necesidades particulares de sus clientes, capaz de adaptarse y prosperar en un entorno dinámico, siempre cambiante debido a los avances tecnológicos y las tendencias de mercado.
Por estos motivos, es clave que el operador ferial esté al tanto de las últimas tendencias en nuevas tecnologías y soluciones digitales para ser innovador y adaptarse a las necesidades y exigencias de cada evento. A ello se deben añadir habilidades excepcionales en marketing y comunicación para promocionar eficazmente la feria a través de un mix de herramientas y atraer tanto a expositores como a visitantes. Además, es esencial ser un gestor de relaciones con capacidad de coordinar a una amplia gama de stakeholders, tener una gran capacidad de organización y gestión de la logística y aplicar prácticas sostenibles en todo el proceso. Y en estos momentos hay otro aspecto fundamental que no se puede dejar de lado: ser capaz de ofrecer experiencias únicas y personalizadas a los asistentes.
En resumen, el nuevo operador ferial profesional debe ser un líder adaptable, innovador y multifuncional, capaz de navegar con destreza en el cambiante mundo de las ferias comerciales, al tiempo que ofrece experiencias inolvidables y de alto valor para todos los participantes.