Empresas Premium
La nueva cider del Grupo El Gaitero acaba de ver la luz y ya ha sido premiada, junto a otros productos de la firma, en los prestigiosos Cider World Awards de Frankfurt.
Grupo El Gaitero se vuelve de los Cider World Awards con el mejor sabor de boca. Como cada año ha tenido lugar en Frankfurt (Alemania) este concurso, una de las citas más esperadas del calendario de certámenes internacionales: fue el pasado 3 de junio, fecha en la que se celebraba el Día Internacional de la Sidra. Una jornada memorable para el Grupo El Gaitero que se lleva a casa cuatro Medallas de Oro y dos Diplomas de Honor.
En total seis distinciones que son un fiel reflejo de la firma, entre los premios recibidos coexisten etiquetas icónicas, como El Gaitero Extra que lleva más de 100 años en el mercado, con otras como Spring Cider, que acaba de ver la luz, o la sidra de hielo 1898, una de las joyas con las que la marca demuestra su inmensa capacidad para crear sidras de todo tipo y de altísima calidad.
Cider World está organizado en cooperación con la Universidad Geisenheim de Ciencias Aplicadas, una de las principales universidades del mundo en el campo de la tecnología de bebida y cuenta con un jurado que vuelve a ser internacional (con motivo de la pandemia la edición anterior solo pudo contar con jueces de Alemania) y en el que destacan expertos de distintos lugares del mundo como Francia, España, Inglaterra o Canadá entre otros.
Es el último y potente lanzamiento de la firma y acaba de aterrizar en el mercado. Una sidra, fresca y ligera, con un perfecto equilibrio entre el dulzor y el carbónico y expresamente creada para el “mundo cider”. Gracias a su baja graduación alcohólica es una alternativa ideal para disfrutar de un aperitivo, un afterwork o para el “tardeo”.
No hay duda de que El Gaitero Extra es una de las sidras más emblemáticas de la firma. Esta sidra dulce está elaborada por métodos tradicionales, con mezcla de manzanas típicamente asturianas elegidas por su riqueza aromática.
La bodega histórica de El Gaitero terminó de construirse en este año por lo que la firma decidió rendirle tributo poniendo su nombre a uno de los productos más especiales, su sidra de hielo.
Hecha con manzanas de sus propias pomaradas que se recogen y congelan para obtener un mosto a partir del cual se prepara esta sidra que acaba madurando cuatro meses sobre sus lías antes de ser embotellada.
Se trata de una sidra con aguja natural que le otorga mucha personalidad. Concebida para tomarse servida en copa de vino, evoca a la sidra tradicional y por eso es un producto de lo más auténtico con la ventaja de no necesitar escanciado.
Con un carbónico natural obtenido gracias a una segunda fermentación, es la apuesta más chic de la firma. Pomarina Brut se sirve y disfruta como si fuese un champagne, sola o acompañada, por ejemplo, de propuestas gastronómicas a base de pescados y mariscos.