Empresas Premium
Los Quesos de Suiza son famosos en todo el mundo por su inigualable sabor y son aptos para intolerantes a la lactosa y al gluten. Según Fundación Española del Aparato Digestivo, se calcula que entre el 20 y el 40% de la sociedad española podría ser intolerante a este azúcar presente en todas las leches de los mamíferos.
Los Quesos de Suiza con denominación de origen, aquéllos que en su etiqueta aparece el símbolo AOP (Appellation d’Origen Protégée) y el queso Appenzeller están pensados también para este colectivo ya que durante el proceso de elaboración, toda la leche se transforma en ácido láctico y otras sustancias de las bacterias del ácido láctico. Luego, los quesos suizos están sometidos a largos periodos de maduración, por lo que, en el momento de consumirlos, la lactosa ha sido completamente metabolizada.
Las vacas se alimentan principalmente de pastos naturales y en las queserías tradicionales en las que se producen, no utilizan ningún tipo de aditivo químico. Estos artesanos quesos se elaboran con leche cruda de vaca recién ordeñada, por lo que, al no pasteurizar, conversan mejor sus propiedades y su sabor
Quesos de Suiza, con DO AOP
En definitiva, los Quesos de Suiza con Denominación de Origen AOP (L’Etivaz AOP, Vacherin Fribourgeois AOP, Sbrinz AOP, Le Raclette du Valais AOP, Le Gruyère AOP, Tête de Moine AOP, Emmentaler AOP) y Appenzeller son un placer apto para todos los tipos de paladares.
Sus altos estándares de calidad y sus rigurosas normas, permiten a la población deleitarse con unos quesos saludables, auténticos, sin gluten, sin lactosa y, sobre todo: naturales.