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Actualmente hay en el mercado sistemas innovadores que detectan los riesgos de colisiones y alertan a los operarios para evitarlos.
La logística es un ámbito clave involucrado en infinidad de sectores, y como tal ha experimentado un gran aumento en su actividad y dimensionamiento en los últimos años, impulsada también por el incremento de la demanda de consumo por fenómenos como el auge de la venta online.
En el centro de las operaciones logísticas están los almacenes, los muelles de carga y el desplazamiento de carretillas; espacios y trabajos que en un contexto de intensificación operativa requieren una seguridad reforzada, así como del paso de un modelo de prevención de riesgos pasivo a otro activo.
Para ello, tenemos a la tecnología como gran aliada, con la vista puesta en la mejora de las condiciones en todo lo concerniente a protección en el espacio de trabajo y aumento en los niveles de seguridad en almacenes logísticos donde la circulación de vehículos de carga presenta una alta actividad, y su rendimiento depende que puedan realizar su labor en el menos tiempo posible.
Bajo este enfoque, emerge como una solución muy valiosa el semáforo industrial anticolisión con sensores de proximidad. Concretamente modelos como el Observation Post ofrecen funcionalidades tan valiosas como la detección de carretillas con emisión de alertas a tiempo real, pudiendo operar en rangos que abarcan desde los 4 hasta los 10 metros de distancia, a seis metros de altura y con un ángulo de percepción de 45º.
Además, el semáforo de seguridad industrial en su configuración estándar puede hacer detecciones de elementos que se muevan hasta a 10 Km/h, y mediante la adaptación de los sensores es capaz de funcionar con velocidades todavía mayores. Igualmente, puede calibrarse manualmente la sensibilidad de estos detectores para adaptarlas a las necesidades específicas de cada empresa y espacio de trabajo.
Por todo ello, hablamos de un recurso tecnológico de altas prestaciones que en primer lugar es sinónimo de prevención, ya que evita accidentes y mejora la seguridad en el trabajo, pero que también destaca por su repercusión económica positiva, sin ir más lejos evitando colisiones que comportan gastos en reparaciones de vehículos o infraestructura.
Igualmente, agiliza la circulación de vehículos en espacios industriales, permitiendo conjugar la intensificación operativa con la preservación de unos altos estándares de seguridad, algo fundamental atendiendo la exigencia a las que están sometidas las empresas actuales en todo lo que tiene que ver con su actividad logística.
Asimismo, tanto la instalación como la configuración de este semáforo industrial inteligente resultan muy sencillas, y no se requiere la realización de ninguna obra para el montaje.
Los sensores de proximidad de Observation Post permiten la detección y la advertencia de movimiento de carretillas montacargas, susceptibles de colisionar con el personal a pie u operadores de otras carretillas. Con ello, las proximidades peligrosas son perfectamente alertadas para evitar choques que puedan provocar daños personales o materiales.
Así, gracias al funcionamiento del semáforo inteligente como recurso de sensorización y aviso se mejora la seguridad en puntos ciegos o de visibilidad escasa, al ser alertada de manera adecuada la presencia de carretillas en estos lugares, que se quedan fuera del radar visual.
Asimismo, junto a Observation Post, en el mercado también podemos encontrar otros sistemas de los mismos fabricantes como Junction Post, que ha sido concebido para proteger la seguridad y agilizar la circulación en los puntos de cruce de los espacios logísticos. Para la realización de este cometido, puede incorporar dos, tres o cuatro sensores, que habilitan la detección en distintas direcciones.
Teniendo en cuenta las prestaciones que brindan ambos recursos, podemos destacar que ambos servirían para detectar vehículos y propiciar una circulación segura, eficiente y rápida. Si bien, la elección de una opción u otra dependería de aspectos como las características específicas del espacio, o de cómo es la interacción de carretillas u otras maquinarias móviles y vehículos que en él operen. Siempre sin perder de vista, por supuesto, los estándares existentes en los protocolos de prevención de riesgos laborales de las distintas empresas.
Estos sistemas de semáforos inteligentes suponen un auténtico salto adelante hacia un modelo activo de seguridad laboral, superando el pasivo que ha caracterizado tradicionalmente a espacios industriales, centros logísticos, almacenes, etc.
De esta forma, las políticas de prevención se enriquecen, al ofrecer al personal soluciones de protección mucho más eficaces que elementos pasivos al uso como barreras, barandillas, espejos, conos, etc. Materiales que hacen su aportación, pero que distan mucho de proporcionar las prestaciones en seguridad de otros sistemas más avanzados como los que hemos referido.
Por poner un ejemplo, los espejos pueden ser muy útiles para poder visualizar otros elementos móviles con los que exista riesgo de colisión, pero inevitablemente hay ángulos que no son capaces de cubrir que se convierten en peligrosos puntos ciegos.
En este contexto emergen como soluciones especialmente valiosas los sistemas de semáforos inteligentes, que ofrecen seguridad al tiempo que fluidifican el trabajo, reduciendo además la necesidad de destinar recursos humanos a la vigilancia de la óptima interoperabilidad de todos los recursos que operan en un mismo espacio.
