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La industria española de turrón y mazapán prevé cerrar 2021 con un incremento del 4% de su facturación respecto a los resultados del ejercicio anterior (290,8 millones de euros), según las estimaciones realizadas por la Asociación Española del Dulce (Produlce), que integra a 69 compañías de este sector, entre ellas las principales empresas turroneras del país.
El sector de turrones y mazapanes apuesta esta Navidad por originales sabores y formatos que respondan a las nuevas tendencias y demandas de los consumidores. Ediciones limitadas desarrolladas junto a algunos de los mejores chefs del país, bandejas multiproducto y formatos snacking o una oferta mucho más extensa en sabores y texturas de las gamas sin azúcar, son algunas de las novedades que podrán encontrar los consumidores en los lineales de los supermercados y del pequeño comercio junto a los productos más tradicionales y reconocidos del sector que tampoco pueden faltar en estas fechas.
En este sentido, Rubén Moreno, secretario general de Produlce, apunta que “la escucha activa al consumidor y la innovación han traído una amplísima gama de nuevos turrones y mazapanes con sabores sorprendentes y con formatos que permiten nuevos modos y momentos de consumo”.
Casi 3 de cada 4 innovaciones se dedicaron en 2020 a rediseño (37%), innovación radical (25%) y ampliación de la gama de producto (21%). Este año los principales fabricantes de estos productos han apostado por nuevas selecciones que ayuden a endulzar estas fechas tan señaladas.
Entre esas nuevas propuestas destacan las propuestas que priorizan el compromiso con la sostenibilidad y el medio ambiente como los turrones de Jijona y de Alicante BIO (El Lobo): en formatos los “Thins de El Almendro” (Delaviuda), los nuevos “Turrones Virginias” (Virginias) con sabores sorprendentes como el turrón azteca o su amplia gama sin azúcar; ); o las propuestas confeccionadas por grandes reposteros como Eva Arguiñano que presenta su plátano meloso con crujiente de galleta bañado en chocolate negro, de la mano de Chocolates Lacasa; o las creaciones de Albert Adrià y José Andrés, con Torrons Vicens, como su turrón Cherry Times elaborado partir de una ganache de cerezas con praliné de nueces pecanas, crujiente de arroz y toffee de Ras el Hanout.
“La apuesta decidida de las compañías españolas por la calidad, la innovación y la diversificación de productos dulces de Navidad ha generado una gran expectación en el consumidor. Se han convertido en un ‘clásico navideño revitalizado’ que los españoles demandan, cada año más y más pronto, aunque el 90% de las ventas se siguen produciendo en las últimas semanas del año” señala Rubén Moreno.
A pesar de la incertidumbre que rodeó la última Navidad, la categoría de turrones y mazapanes cerró el año con un aumento de sus ventas nacionales, que crecieron un 3,7% en términos de valor y un 4,8% en volumen; suponiendo 245,5 millones de euros. Este aumento del consumo en nuestro país sirvió para neutralizar la fuerte caída en las ventas al exterior, que disminuyeron un 18% en términos de valor, aportando 45,3 millones de euros a la facturación total del sector, y con Reino Unido y Estados Unidos como destinos de referencia. A pesar del ligero aumento en las ventas de otras especialidades en 2020, todavía turrones y mazapanes siguen siendo líderes indiscutibles acaparando el 85% de las ventas de dulces navideños en nuestro país.
Durante la campaña de Navidad, cuyos procesos de producción comienzan antes del verano, se experimenta un alto repunte de las contrataciones, que pueden suponer un incremento del 50% sobre la plantilla permanente en algunas empresas. Se trata de un sector que genera alrededor de 2.000 empleos directos en España y que en los últimos años se ha consolidado como un agente dinamizador y generador de estabilidad en la España rural, como pone de manifiesto el hecho de que hoy más de 6 de cada 10 contratos en el sector son indefinidos.
La Asociación Española del Dulce (PRODULCE) está formada por 69 empresas pertenecientes a los cinco sectores que la definen: fabricantes de cacao y chocolate; caramelos y chicles; galletas; pastelería, bollería y panificación; y turrones y mazapanes. Es una organización sin ánimo de lucro, con una representatividad en torno al 80%, cuya actividad principal es velar por los intereses colectivos del sector, proporcionar servicios de valor a sus asociados, posicionarse como una asociación de referencia para las entidades con las que se relaciona y dar a conocer a prescriptores y consumidores el grado de compromiso y responsabilidad del sector y sus esfuerzos de mejora en términos de innovación, seguridad alimentaria y nutrición.