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Martin Pinzger, CEO del Consorcio VIP (a la izquierda) y su director comercial Fabio Zanesco reflexionan sobre cómo ha afectado el Covid-19 a la producción y comercialización de las manzanas.
“Que las empresas estén formadas por personas suena banal, pero cuando nos enfrentamos a problemas graves como los que está habiendo ahora mismo, nos damos cuenta plenamente del valor de nuestros colaboradores: más de 800 personas en nuestro grupo, con las cooperativas asociadas, nos han permitido seguir funcionando y continuar proporcionando a los consumidores manzanas convencionales y biológicas”, asegura Martin Pinzger, CEO de VIP.
Desde el momento en que la amenaza de Covid-19 alcanzó su punto máximo y, primero Italia y luego Europa, empezaron a detenerse, VIP ha activado todos los procedimientos y medidas de emergencia para proteger a su personal y, al mismo tiempo, garantizar el negocio de la empresa. “Somos conscientes de que estamos viviendo un momento de gran tensión y, como parte de la cadena de producción de frutas, debemos asegurarnos de que podemos sostener el esfuerzo y hacer frente a la complejidad de este escenario”, afirma Pinzger.
Fabio Zanesco, Director Comercial de VIP, explica que “en este momento, la situación en el mercado y en nuestros almacenes se ha estabilizado y podemos hacer balance, pensando en la mejor manera de organizarnos para los próximos meses, ya que una parte importante de la producción de 2019 está todavía en stock y nuestra campaña tendrá que llegar hasta la nueva cosecha, como siempre”. La producción europea 2019, inferior a lo previsto, y el dinamismo de las ventas en el período septiembre-febrero ya hacían pensar en una buena segunda parte de la temporada. “Nuestros stocks actuales son, como esperábamos, inferiores a los del año pasado. Así que tendremos que ser capaces de gestionar las manzanas con clientes estratégicos para dar continuidad de suministro al mercado”, continua Zanesco.
En este momento también es difícil entender la situación que puede darse respecto a la fruta de verano, que siempre tiene un impacto en la demanda de manzanas. “Entre algunas heladas de los últimos días, cuyas consecuencias en nuestra zona aún no se han evaluado plenamente, y la reducida disponibilidad de personal para las operaciones en el campo, que está empezando a suponer un problema, hacer previsiones a medio plazo sería inapropiado”, comenta el Director Comercial de VIP, que prefiere centrarse en la gestión del producto que tienen hoy, semana tras semana. “Obviamente, pronto va a llegar el momento en que recibamos indicaciones de nuestros clientes sobre cuánto, qué y hasta cuándo suministrar. Dado el estado de la oferta y la demanda, preveo que los precios subirán en las próximas semanas. Pero es algo que normalmente ocurre en la segunda mitad de la campaña, cuando varios productores se quedan sin producto, esto no es especulativo” afirma Zanesco.
En cualquier caso, VIP trabaja 12 meses con sus partners, una promesa que siguen cumpliendo. “Lo que nos está creando serias dificultades es transformar la producción en producto envasado (bandejas o bolsas), ya que la capacidad está físicamente limitada por las líneas de elaboración existentes y, lamentablemente, no siempre se puede satisfacer esta demanda. Veremos al final de la crisis lo que quedará de esta nueva necesidad y cómo volverá a emerger el debate sobre el plástico que, comprensiblemente, ha desaparecido por completo del radar”, señala Pingzer.
En conclusión el CEO de VIP agradece una vez más “a todos nuestros colaboradores, nuestros proveedores y clientes, que cada día ponen a disposición sin reservas sus habilidades y su sentido cívico para llevar al mercado una manzana buena y natural”.
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