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Aenor ha entregado los primeros certificados Aenor Conform de Atún de Pesca Responsable (APR) a las conserveras Salica y Garavilla, con sus marcas Campos e Isabel, respectivamente, convirtiéndolas en las primeras compañías a nivel mundial en obtener este reconocimiento que controla la trazabilidad completa de la pesca del atún
El certificado Aenor Conform de Atún de Pesca Responsable (APR) garantiza la trazabilidad en la pesca del atún desde su extracción en alta mar así como la seguridad y salud de los pescadores, hasta la cadena de custodia en el procesado y distribución de las conservas en tierra. De esta manera, se garantiza al consumidor final las mejores prácticas medioambientales y laborales.
El CEO de Aenor, Rafael García Meiro, entregó la certificación a Juan Corrales, CEO de Garavilla y a Javier Arbaiza, director general de Salica, y aseguró que “Atún de Pesca Responsable es un sello que representa la evolución de Aenor Cuando nacimos, en 1986, la necesidad más importante de la economía española era la estandarización con calidad de los procesos industriales. Por ello, trabajamos y ayudamos a superar ese reto, esa brecha de competitividad para apoyar a las empresas de nuestro país en la superación de cada nuevo desafío”.
Por su parte, Juan Corrales, Consejero Delegado de Garavilla afirmó que "este es un enorme éxito que sitúa al sector pesquero español en posiciones de liderazgo, y es una gran alegría comprobar que prácticas que mejoran la vida de las personas, cuidan de su seguridad, y vigilan la pesca responsable y el cuidado de un recurso tan valioso como es el mar, acaban encontrando su camino y haciéndose realidad. No es sino una manera de poner en valor lo que la flota española lleva haciendo durante mucho tiempo. El medioambiente y las personas constituyen el centro de nuestra estrategia de responsabilidad social corporativa”.
Asimismo, Javier Arbaiza, CEO de Salica, aseguró que “la certificación APR supone un valor añadido, aportar algo más a nuestros clientes y demuestra nuestro compromiso con nuestros consumidores”.
La secretaria general de Pesca en funciones, Alicia Villauriz, ha valorado los esfuerzos realizados en los últimos años por el sector pesquero español para mejorar la sostenibilidad de su actividad. Ha destacado que esta certificación AENOR Conform es un ejemplo más de ese compromiso y contribuirá a que el consumidor sea consciente de la importancia que tiene que el atún se haya capturado de manera responsable, segura y sostenible.
La certificación de APR está basada en la Norma UNE 195006 nacida en 2016 como respuesta a la creciente demanda por garantizar una actividad pesquera responsable del atún cubriendo todos los factores que interfieren en la conservación de los recursos naturales y humanos. El proceso de certificación comprende dos fases: en la primera se realizaron auditorías tanto en las oficinas de los armadores como en puertos de Costa de Marfil, Seychelles, Ecuador y El Salvador. En ellas se verificaron que sus 47 buques cumplen las mejores prácticas en el control de la actividad de pesca, condiciones sociales y de seguridad en el trabajo y control marítimo y sanitario. En la segunda, se certificó el resto de la cadena de custodia de las empresas de procesado y distribución de las conservas para obtener una trazabilidad completa. Esta certificación de la flota es de carácter internacional, porque se han certificado barcos de 7 países además de España: Seychelles, Ecuador, El Salvador, Panamá, Curaçao, Guatemala y Belice.
Las nuevas latas convertirán a los consumidores españoles en los primeros del mundo que podrán adquirir este producto con un certificado que avala que han llevado a cabo las mejores prácticas medioambientales gracias al sello AENOR Conform. Este sello garantiza el cumplimiento de las condiciones laborales requeridas por la Organización Internacional del Trabajo en su Convenio 188, a bordo de los buques, y avala a distribuidores y consumidores que el atún que comercializan y consumen proveniente de las empresas y barcos certificados, están respaldados por unos exigentes estándares en materia sociolaboral y de seguridad en el mar, por encima de los requisitos legales actuales.
