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Un estudio realizado por la empresa de análisis de mercados Nielsen y el Observatorio Español de Mercado del Vino, OEMV, cataloga en hasta seis tipos diferentes a los consumidores de vino.
37 millones de personas (mayores de 18 años) son potenciales consumidores en nuestro país, de los cuales 22,5 millones se declaran bebedores de vino, aunque su gasto es muy desigual. El informe elaborado por la consultora Nielsen y el Observatorio Español de Mercado del Vino, OEMV, indica que el 80% dice ser consumidor habitual, frente al 20% que se dice hacerlo de manera ocasional.
A continuación desglosamos los diferentes 6 tipos de consumidores según este análisis de mercado:
- El ‘tradicional’: bebe vino a diario en las comidas, educado en la cultura del vino como alimento. No se gasta mucho dinero pero tiene un consumo importante, sobre los 52,8 litros anuales, y representa el 6,9% del total de las ventas (unos 82 millones de litros). Su perfil corresponde a un hombre, mayoritariamente, que bebe vino tinto, de clase media o media-baja y de edad elevada. Bebe 5,3 copas de vino por semana, para el total de la población española el resultado es de 20 litros anuales por persona.
-El ‘urbanita inquieto’, que bebe 51,6 litros al año, y representa el 7,6% del total de las ventas. Es un consumidor que conoce el vino y que quiere probar cosas nuevas, fuera de lo tradicional; representa el segundo puesto en cuanto a consumo per cápita.
-El ‘trendy’, un tipo difícil de definir pero que resulta muy numeroso. Representan el 26% de las ventas, aunque con un consumo per cápita mucho menor al de los otros dos tipos, 37 litros por persona y año, que multiplicado por el número de personas que son resulta un volumen importante, 222 millones de litros. No le importa gastar algo más de dinero porque disfruta del vino y quiere dar a entender que sabe y. además, le gusta disfrutarlo.
- El ‘rutinario’, que le interesa el vino, lo compra de vez en cuando y lo consume con sus amistades en ratos de ocio. Supone el 21,5% del total de las ventas, lo que compensa el menor consumo por persona.
- El ‘ocasional interesado´. Le gusta el vino porque está de moda y le interesa aprender de vinos, y de vez en cuando se gasta algo de dinero en una botella cara. Representa el 24,5% de las ventas con un consumo de unos 32 litros por persona y año.
- El ‘social´,, sólo bebe en celebraciones o de vez en cuando, con un consumo mucho más bajo, son el 13% de las ventas, casi el doble que el bebedor tradicional.