Retail Actual Septiembre 2018

La llamada vuelta al cole es también el momento de la puesta a punto para el sector de la distribución alimentaria de cara a los meses que vienen por delante. Si bien es cierto que el objetivo sigue siendo el mismo: poder mantener al alza esa confianza del consumidor tan necesaria para que no se reduzca el gasto. Los datos del primer semestre de año que aporta Nielsen parecían indicar que vamos por el buen camino, esta confianza subió hasta los 92 puntos, uno por encima de la registrada en el mismo periodo de 2017. Entre los motivos que esgrime la consultora se sitúa la estabilidad en el empleo como motor para este crecimiento. Eso sí, no hay que bajar la guardia porque el Indicador mensual de Confianza del Consumidor (ICC) elaborado por el CIS alerta que en agosto este índice ha bajado 3,7 puntos respecto a la cifra del mes anterior. Se debe al retroceso de 2,4 puntos en la valoración de la situación actual y especialmente a la caída de 4,9 puntos en las expectativas. Sin querer ser alarmistas, la fragilidad de un Gobierno en minoría y tan necesitado de apoyos, la situación de inestabilidad en Cataluña, un posible adelanto de las elecciones en Andalucía, o una sensación de que la economía en España ha echado el freno pueden ser algunos de los lastres. Ante este panorama, a la industria alimentaria sólo le queda seguir trabajando cada día en recuperar por si misma esta confianza a través de un buen trabajo coordinado de toda la cadena de distribución y apuesta por la innovación en cada decisión que se tome.