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El sector retail alimenticio en España está en constante evolución, sobre todo en su proceso de digitalización. Miles de minoristas han tenido que adaptarse a esta nueva realidad. Hablamos con Miguel Navarro, CEO, fundador y principal formador de la escuela online Productividad Feroz.
La tecnología y la digitalización son factores imprescindibles para adaptarse a las necesidades de los consumidores en la actualidad. Desde sistemas de gestión de inventario hasta aplicaciones de seguimiento de ventas, existen muchas herramientas tecnológicas disponibles para ayudar a los profesionales a trabajar de una manera más eficiente y efectiva, existen aplicaciones que incluso facilitan el trabajo más costoso, como es el caso de la realización de inventarios.
Esta productividad en el negocio es necesaria para alcanzar el éxito, pero hay que tener en cuenta una gran cantidad de elementos para conseguirla, no únicamente la adaptación a los nuevos formatos digitales. Por ejemplo, es imprescindible tener unos objetivos firmes que se han de marcar tras una investigación sobre el mercado en el que nos vamos a mover, y, sobre todo, el cliente. Cómo podemos ofrecerle exactamente al cliente lo que espera de nosotros como empresa.
De todo lo malo, se saca algo bueno y es que cuando una empresa va mal, los propios empresarios deben analizar el problema para encontrar una solución. Si nuestro principal objetivo es la mejora de la productividad en este tipo de sector debemos ver que es lo que falla, y marcar una serie de estrategias que nos hagan revertir el problema. En muchas ocasiones, mejorar la productividad requiere hacer una inversión en recursos humanos para que el personal se sienta lo más cómodo y concentrado posible.
La jornada laboral debe ser un momento en el que podemos aprovechar para desconectar de los problemas personales, pero un entorno nocivo al final puede agravar más estos problemas y afectar directamente al trabajo de todo el equipo, a la salud mental de los empleados, y por consiguiente a la productividad del negocio, de hecho, según la Guía del Mercado Laboral 2022 de Hays, un 43% de los trabajadores españoles sufre de fatiga y estrés por su trabajo.
Por este motivo es necesario fomentar un entorno amable y transparente, donde los empleados se sientan a salvo de expresarse libremente, y que esté orientado a que todos avancen hacia una misma dirección, esto hará crecer la productividad de forma sorprendente. Además, muchas veces no nos surgen ideas, pero podemos complementar las de nuestros compañeros, ya que la colaboración y el trabajo en equipo son claves para la mejora de la productividad.
La mente es uno de los motores principales de nuestro cuerpo, debemos desarrollarla y mejorarla para alcanzar nuestros límites más insospechados. La capacitación y el entrenamiento constantes son importantes para poder disparar el rendimiento del cuerpo y mente, así como, desarrollar una disciplina acorde a uno mismo. Mantener al personal de trabajo formado ante cualquier novedad del sector o cualquier nueva aplicación que pueda ser administrada en el local, producirá un gran aumento en la confianza del personal, que se verá más capacitado y podrá asumir sus responsabilidades con más eficiencia.
La mayoría de los profesionales trabajan en grupo, ya que cuantas más ideas surgen mejor, pero cada persona es diferente y tiene un carácter totalmente distinto al resto. Además de cursos de capacitación especializada, es muy positivo que los trabajadores realicen cursos de gestión y mejora de la inteligencia emocional, de hábitos, o de productividad, ya que podrán ayudarles a crear un equipo de trabajo más dinámico y consciente de sus responsabilidades, será óptimo para conocerse más unos a los otros y saber cuál es la forma idónea para conseguir un ambiente de trabajo positivo y motivador.
Por otro lado, la alimentación juega un papel clave. Unos buenos hábitos alimenticios compuestos por productos sanos y saludables provocan un aumento de la energía, mejorando a su vez el rendimiento y la productividad en el trabajo. Cuando un trabajador no tiene una rutina de sus hábitos diarios, puede arrastrar problemas de cara a su rendimiento, es decir, si un trabajador no duerme las horas necesarias, no podrá rendir de manera efectiva durante su jornada laboral, y eso afectará al negocio. Un horario pautado con las actividades y la alimentación que se deben seguir, ayudará a todas las personas a poner orden en su vida personal y laboral, así que un curso que les ayude a poner en marcha estas dinámicas puede ser muy beneficioso para la empresa.
Implementar todas estas medidas formativas para poder mejor la productividad de los trabajadores es la clave para destacar en un entorno tan competitivo como lo es el retail.
