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Los marketplaces se están convirtiendo en el nuevo estándar del comercio online, con un crecimiento que duplica al del comercio electrónico tradicional. Nicolás Fournie de Mangopay explica a Retail Actual cuáles son las herramientas que maximicen la experiencia en esta creciente economía de las plataformas.
Versátiles y escalables, los marketplaces deben tener la capacidad de adaptarse a una mayor demanda sin afectar a los niveles de rendimiento. Y es que, del lado del consumidor, los marketplaces ofrecen una amplia gama de productos para facilitar las compras. No obstante, también deben asegurarse de ser, no solo una plataforma tecnológica, sino también una que presta servicios que le faciliten la venta de productos a los vendedores. Y es que, según datos de Accenture, el 60% de las ventas del pasado Black Friday fueron realizadas por vendedores que utilizaron servicios logísticos proporcionados por el marketplace en el que estaban presentes.
Así, cada vez más, la competencia obliga a los marketplaces a elevar su nivel de servicio para atraer a los mejores compradores y a los mejores vendedores, que tienen expectativas muy diferentes. Por parte de los consumidores, la rapidez y la fluidez de la experiencia son primordiales. Por ejemplo, buscarán más flexibilidad en los pagos. Por ello, la mayoría de ellos preferirá los marketplaces que ofrezcan múltiples métodos de pago, siempre que el proceso de compra siga siendo sencillo.
En cuanto a los vendedores, quieren poder cobrar rápidamente sus ventas. Cuanto más venden, más se multiplican los flujos de pago. La gestión manual de estos flujos financieros puede convertirse en un verdadero dolor de cabeza cuando el volumen de vendedores aumenta. Por eso, los proveedores de tecnología de marketplaces hacen hincapié en sus procesos automatizados. Por ejemplo, en cuanto al procesamiento de los pagos, los vendedores quieren abrir sus cuentas de vendedor casi al instante y recibir los fondos rápidamente. Por eso es importante ofrecerles una solución de pago automatizada en el marketplace.
Y es que, la incorporación de nuevos proveedores es fundamental para que un marketplace apueste por su máximo rendimiento: su valor estará correlacionado con su número de vendedores, preferentemente con una mezcla cada vez más internacional. En este sentido, cuidar la incorporación de todos los vendedores, sea cual sea su país de origen, ofreciéndoles una incorporación sencilla y completa les animará a vender en la plataforma. Pero más importante todavía: los fidelizará. Por ejemplo, automatizar el envío de los documentos justificativos necesarios para la identificación de los vendedores facilita el registro de nuevos vendedores. En los marketplaces más eficaces, la parte administrativa relativa a la identificación de los vendedores, mediante la recogida del formulario KYC (Know Your Customer) y de los documentos solicitados, como los documentos de identidad, la lista de beneficiarios efectivos de una empresa o copias de los estatutos de la empresa solo lleva una semana.
No es un secreto que cada país tiene sus propias especificidades, sus propios hábitos de consumo y sus propios métodos de pago. Por ejemplo, en el caso de España, tenemos el caso del pago por bizum. Para desarrollar un marketplace internacional, los operadores tendrán que adaptar la experiencia de compra a sus usuarios finales ofreciendo los métodos de pago adecuados y aceptando las monedas locales. Esto permitirá a sus vendedores vender fácilmente en el extranjero. El objetivo es que puedan comerciar en el mayor número posible de países a través de dicho marketplace, eliminando la complejidad de los flujos de pago.
La consecución del objetivo pasa por ofrecer a los vendedores las mejores condiciones de venta para generar suficientes ofertas que atraigan a los compradores. En este sentido, una gestión automatizada de los flujos de pago es clave y se trata de una condición esencial para que un marketplace escale rápidamente.
