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En estrecha colaboración con la empresa sevillana Productos Salud, Empacke ha trabajado en la creación de la marca de leche condensada Milvalles.
Desde el naming hasta el ecommerce pasando por la identidad gráfica y el packaging de toda la familia de productos. Desde hace unos meses Milvalles es una realidad, es una marca comercial de leche condensada, principalmente, y de otros productos lácteos de la empresa Productos Salud, ubicada en la localidad sevillana de Herrera. Dedicada desde hace más de veinte años a la comercialización y envasado de leche condensada, elaborada con leche fresca de vaca.
Productos Salud es una compañía que no ha parado de ganar cuota de mercado, innovando en leche condensada y, ahora, creando su nueva marca para el gran consumo. Codo con codo en Empacke se ha trabajado iniciando este ilusionante proyecto con uno de los conceptos fundamentales del branding: el naming.
El naming es el proceso mediante el cual se determina el nombre de la marca. Se barajaron varios nombres, pero al final el que obtuvo mayor consenso fue Milvalles. Con este nombre se desarrolla el carácter diferenciador de la marca y trabajar la conciencia y la asociación con los valores que pretende transmitir, como son el bienestar animal o la naturaleza.
Milvalles, mediante un juego de palabras, hace referencia al origen de la leche, producida en valles de distinta procedencia, pero siempre de forma natural y con la máxima calidad. Durante todo el periodo de producción se cuida hasta el último detalle, poniendo especial atención al comportamiento, la alimentación y la bebida que reciben las vacas, porque cuanto mejor estén, mayor será la calidad.
De esta forma, Milvalles representa la naturalidad y frescor de los valles y prados donde pastan vacas cuidadas por ganaderos para obtener una leche fresca que luego se transforma en deliciosa leche condensada. El nombre posiciona claramente a la marca y hace que sea más fácil para los consumidores identificar y elegir sus productos, pues se asocian rápidamente con sus beneficios.
En cuanto a la identidad corporativa, se ha apostado por un diseño fresco que evoca conceptos como vaca, ganado, prados, montañas, pastos, cielo, naturaleza… Con el uso de colores verdes, azules, celestes y blancos inspirados en la naturaleza. La tipografía manuscrita representa la caída del chorreón de leche condensada, con unos trazos blandos de doble contorno que conforman volumen, suavidad y delicadeza.
Las necesidades de los consumidores han cambiado y es necesario adaptar los formatos y el producto para cubrirlas. En este sentido, Milvalles ha incorporando nuevos envases sirvefácil antigoteo de leche condensada entera, desnatada 0% M.G. y desnatada sin lactosa, en varios formatos: 450g y 625g.
Por otro lado, la bolsita Let’s GO! con sobres monodosis de leche condensada entera es superútil para llevarla a cualquier lugar o acompañar el café de cápsula en el hogar. Y por último, las latas de leche condensada Milvalles, ideal para elaborar postres, con formatos de un kilo y 740 gramos para la leche condensada entera, y de un kilo para la leche condensada desnatada.
El diseño de packaging de estos productos es fresco, juvenil, alude a lo natural y presenta mediante una fotografía el consumo más habitual de cada formato. Así, el envase sirvefácil es el más adecuado para un café bombón o para acompañar las frutas de leche condensada; y las latas suelen utilizarse más para postres y repostería.
Para cada variedad de leche condensada se ha utilizado un código cromático distinto. Azul para la leche entera, rojo para la desnatada y morado para la sin lactosa. Asimismo, cabe resaltar el espacio reservado en la parte posterior de estos envases destinado a la divulgación de recetas elaboradas con leche condensada.
Se presenta en formato sirvefácil de 450 gramos o familiar de 625 gramos. El sirvefácil es ergonómico, cómodo de usar y dispone de tapón antigoteo para racionalizar la cantidad, ideal para el café bombón. Por su parte, las latas de 1kg y 740 gramos son perfectas para la elaboración de bizcochos tradicionales y postres caseros.
La leche condensada desnatada sin lactosa 0% mg Milvalles tiene todas las propiedades de la leche eliminando la lactosa. Está pensada para todo tipo de consumidores, tanto para aquellos que son intolerantes a la lactosa como por aquellos simpatizantes de los productos libres de lactosa. Formato sirvefácil de 450 gramos.
Por último, Milvalles también dispone de leche evaporada como sustituto de la nata. Se presenta en formato brick de 500 ml, cómodo y práctico. Su tapón de rosca lo hace higiénico y preserva las cualidades del producto perfectamente. Además, el envase se puede reciclar.
En el escenario actual con la crisis sanitaria y económica consecuencia de la pandemia por Covid-19, las empresas de alimentación necesitan tener presencia en la red. Una web corporativa bien posicionada con tienda online es actualmente el salvavidas de cualquier pyme. No importa el tamaño de la entidad, la salida está en la venta online.
Los compradores online en España han aumentado y es lógico que este tipo de venta se convierta en una buena opción en plena crisis. En este 2020 ha crecido el número de internautas, a la vez que ha aumentado el número de compradores online.
Por eso, como no podía ser de otra forma, se ha diseñado para Milvalles, una web corporativa sencilla, moderna, con una línea fresca y juvenil (especialmente en las fotografías, ilustraciones y tipografías), en la que se presenta la marca, los productos, las recetas, el club, el contacto y la tienda online.
De la web de Milvalles cabe prestar atención a dos apartados. Uno el de las recetas, en el que se incluye un espacio para que el público interactúe, enviando sus propias elaboraciones con fichas de autor. Y otro el del Club Milvalles, que anima a participar en los sorteos y juegos en redes sociales para ganar lotes de leche condensada. Asimismo, de la tienda online hay que resaltar el pago seguro, el envío gratis a partir de 20€, la recepción del pedido en casa en 48/72 horas (sólo Península) y las ventajas exclusivas online de ‘La Tienda Milvalles’.
